top of page

XXV Domingo del Tiempo Ordinario

Septiembre 22 de 2019

Hacer click en la imagen para ver las lecturas del día

Primera Lectura: Profeta Amós 8, 4-7 Salmo responsorial: Sal 112, 1-2. 4-6. 7-8 Segunda Lectura: Carta del Apóstol San Pablo a Timoteo 2, 1-8 Santo Evangelio según San Lucas 16, 1-13

Reflexión

"DIOS, QUE QUIERE QUE TODOS LOS HOMBRES SE SALVEN Y LLEGUEN AL CONOCIMIENTO DE LA VERDAD"


No nos gusta que ultrajen nuestros derechos, y tampoco nos gusta que alguien se aproveche de nuestras necesidades para explotarnos o manipularnos. El Señor a través del profeta Amós nos exhorta a que vivamos en el ambiente de la justicia y de la convivencia humana, donde debe resaltarse el valor que tiene el hombre, el ser humano que puede experimentar a lo largo de su vida momentos difíciles que en manera alguna deben ser aprovechados por los otros para exigirle comportamientos o acciones indignas que desdigan de su condición humana.


Hoy somos testigos de la corrupción que tiene su escenario propio en aquellos ambientes de pobreza y se compran conciencias con tal de obtener un rendimiento en favor del que explota y manipula. La situación por delicada que ella sea no puede dar pie a que la corrupción o la explotación de las personas tengan asiento en nuestra sociedad.


El texto del evangelio de hoy está ratificando lo que encontramos en Amós, es decir, rechaza de plano la manipulación y la mala administración que hacemos de los talentos y los dones que Dios nos ha regalado.


Al final eso de ser corruptos, eso de hacer regalos con el fin de buscar beneficios egoístas, no conduce a nada bueno y es degradante de la dignidad de la persona que es ante todo imagen de Dios.


Cuando obramos con justicia y con amor, realmente estamos en el ámbito de la verdad, y esa verdad es el mismo Dios, que quiere que cada uno se acerque a ella y no solo se conforme con un acercamiento superficial, sino que nos preocupemos de conocer esa verdad manifestada en la persona de Jesús.


En la carta de que hoy leemos de Pablo a Timoteo, nos damos cuenta que es un llamado a solidaridad en la fe y en la oración, donde Cristo tiene que ser el centro, pues todo debe pasar por Cristo, es el único mediador entre Dios y los hombres.


El salmista nos da hoy un soporte de esperanza, porque Dios con su actitud nos está hablando del amor que nos tiene, por eso nos levanta de nuestras miserias, de aquello que no nos permite un auténtico desarrollo de nuestra personalidad, porque mientras estemos descociendo al hombre como sujeto de valores y se persevere en aprovechar las falencias del otro para percibir réditos sin méritos, no se alcanza un verdadero desarrollo de la personalidad.

Dejemos que nos hable el salmista:


“Levanta del polvo al desvalido,

alza de la basura al pobre,

para sentarlo con los príncipes,

los príncipes de su pueblo”

Sal 112,8


Entradas destacadas
Entradas recientes
Archivo
Buscar por tags
Síguenos
  • Facebook Basic Square
  • Twitter Basic Square
  • Google+ Basic Square
bottom of page